Skip to content

Fucoidanos: una nueva esperanza contra patógenos importantes en avicultura

Como es de conocimiento público, el surgimiento de la Peste Porcina Africana (PPA) ha puesto en alerta a la producción animal mundial. La PPA afecta inexorablemente la actividad porcícola, puesto que es una enfermedad letal y aún no existe vacuna para controlarla. La ausencia de una vacuna trae como consecuencia, restricciones en este mercado así como el sacrificio de millones de cerdos para evitar diseminar la enfermedad, afectando gravemente la oferta de carne porcina y sus derivados. Basada en estos hechos, he adaptado un conocido refrán, teniendo como resultado: “A río revuelto, ganancia de AVICULTORES”, y es que el sector avícola

se ha visto beneficiado con esta coyuntura, ya que al disminuir la oferta de carne suína, sumado al pánico generado en la población hacia su consumo, se ha visto un notorio incremento en la demanda de carne de ave, lo cual hace que sea necesario aumentar su producción.
A la producción a gran escala de carne de ave o huevos, con ambientes y alimentos controlados, se le conoce como avicultura intensiva, y es conocido que este sistema productivo tiene consecuencias a niveles de salud intestinal y sistema inmunológico, ya que de manera natural, las aves modulan su actividad intestinal e inmunológica a través de su andar en campo abierto y a través del alimento o partículas que ingieren dentro del mismo.
Al tener a las aves confinadas, se suprime este mecanismo de autoinmunización, lo que lleva a productores y nutricionistas a encontrar alternativas que contribuyan a mejorar la respuesta inmune preservando la integridad y salud intestinal, ya que los enterocitos del intestino delgado, además de participar en la absorción de nutrientes, constituyen la primera barrera física y química contra agentes patógenos. A todo lo anterior, se suma la exigencia del consumidor por una producción con bases de bienestar animal, libre de antibióticos y promotores de crecimiento, lo que se convierte en un gran desafío para el avicultor considerando que la actividad tiene que ser rentable y sostenible en el tiempo.

Fucoidanos

Actualmente, las algas marinas son consideradas una de las fuentes más ricas en compuestos bioactivos. Éstas se dividen en dos grandes grupos: Macroalgas y Microalgas. Dentro de las macroalgas podemos encontrar tres grupos: algas verdes, algas rojas y algas pardas o marrones. Sólo en éstas últimas, se encuentran los fucoidanos (ninguna otra especie de alga o planta superior los contiene en cantidades significativas), de los cuáles vamos a hablar a continuación y serán el tema central hasta la culminación del presente artículo.

Los FUCOIDANOS son polisacáridos polisulfatados sintetizados únicamente por algas pardas que actúan como prebióticos. En estos últimos años, se han estudiado las diversas actividades biológicas de estos biopolímeros, de las cuales se han reportado con sustento científico las siguientes: actividad antitumoral e inmunomoduladora (Alekseyenko et al., 2007; Maruyama et al., 2006; Ale et al., 2011), antiviral (Makarenkova et al., 2010), antitrombótica y anticoagulante (Zhu et al., 2010), efecto antiinflamatorio y antioxidante (Wang et al., 2010), y en trastornos hepáticos (Hayakawa y Nagamine, 2009). A continuación se muestra la estructura química básica del fucoidano:

Los fucoidanos son considerados prebióticos, alimentos funcionales que llegan al colon y sirven de sustrato a microorganismos para la generación de metabolitos y micronutrientes.

Estructura química básica del fucoidano.

La variación entre fucoidanos se refleja en el contenido de sulfato (9% – 40%), fucosa (25% – 93%), ácido urónico (hasta 25%) y azúcares neutros (Ushakova et al., 2008). Por tanto, cada fucoidano aislado de un alga es un compuesto con una estructura única y, en consecuencia, tiene actividades biológicas específicas. Tal es así que hace poco se descubrió que dos fucoidanos, el RPI-27 y el RPI-28, son capaces de actuar como inhibidores del nuevo coronavirus y serían más efectivos que el remdesivir, un antiviral estándar utilizado contra el COVID-19.

Uso de los fucoidanos en nutricion animal

Los fucoidanos son considerados prebióticos, alimentos funcionales que llegan al colon y sirven de sustrato a microorganismos para la generación de metabolitos y micronutrientes utilizados por el hospedero y además estimulan el crecimiento selectivo de bacterias benéficas como las bifidobacterias y lactobacilos.
En el año 2011, un estudio en lechones retados con cepas de Salmonella Typhimurium, confirmó la capacidad de los fucoidanos para incrementar la microbiota benéfica en el ciego, incrementar los niveles de ácido butírico en el ciego y colon, y lo más importante, los fucoidanos tienen la capacidad de disminuir el conteo de Salmonella de los tejidos del huésped, logrando eliminarlos exitosamente por vía

fecal: https://www.3tres3.com/abstracts/derivados-de-algas-marinas-en-lechones-retados-con-s-typhimurium_30142/
Ya para el año 2012, se logró demostrar también en lechones, la capacidad moduladora del tracto intestinal y del sistema inmune de dietas con fucoidanos y laminarina, un polisacárido bioactivo que también se encuentra en las algas pardas.
Como resultado se obtuvo mejoras en la ganancia de peso y conversión alimenticia, una disminución del número de Escherichia coli intestinales y un aumento de la digestibilidad de nutrientes de la dieta debido a un incremento de las bacterias ácido lácticas y a la mejora de la integridad intestinal: https://www.3tres3.com/articulos/us o-de-ext rac to-de-a lgas-mar inas-en-dietas-para-lechones_30655/
Estos estudios, sin lugar a dudas, muestran los potenciales beneficios que los fucoidanos tienen a nivel digestivo e inmunológico en cerdos, lo que nos permite hacer una extrapolación entre especies monogástricas y concluir, que los fucoidanos pueden actuar en contra de las cepas de E. coli y Salmonella que afectan a las especies avícolas.
Ya para el 2016, se hace más evidente el interés de la comunidad científica avícola por los fucoidanos, tal es así que en ese año se publicó un estudio donde utilizaron fibroblastos de embriones de pollo y huevos embrionados, los cuales fueron retados con cepas del virus de Newcastle y tratados con fucoidanos para probar su actividad antiviral, y como era de esperarse, una vez más los fucoidanos superaron este reto.

Figure 1. Evaluation of fucoidan cytotoxicity to chick embryo fibroblasts. The cell viability was determined by MTT assay and compared with that of untreated cells (100% of viability). Bars represent mean values and vertical lines represent the standard error of mean (n=9, ANOVA p < 0.05)

El estudio concluye que efectivamente, los fucoidanos son activos contra el virus de Newcastle, y esa actividad antiviral se vio en ambos ensayos, tanto in vitro como in ovo, dejando claro que los fucoidanos deben ser suministrados a manera de prevención, para obtener una mayor respuesta antiviral. https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0032579119317869#fig5
Por último, en el 2019 se publicó un estudio en el cual quisieron evaluar los efectos de los fucoidanos y el probiótico Bacillus subtilis en el crecimiento, metabolitos sanguíneos, morfología intestinal y características de carcasa en 250 pollos broilers (Ross 360). Se concluyó que el fucoidano junto al probiótico, mejoraron la conversión alimenticia, el perfil lipídico, la micro morfología intestinal (aumentando la superficie de absorción de nutrientes) y disminuyeron el porcentaje de grasa abdominal. http://psj.gau.ac.ir/article_4547_ a2221c02f1318e5afb9382b3fc519b16.pdf
Con todo lo anteriormente descrito en el presente artículo, podemos concluir que los fucoidanos de las algas marinas pardas, influyen positivamente en el crecimiento, desempeño y en la salud general de las aves. El adicionar algas marinas pardas en dietas avícolas, no solo debe ser considerado por sus propiedades benéficas en las aves, sino también por nosotros mismos, los consumidores, ya que este polisacárido al estimular el sistema inmune y mejorar la integridad intestinal, hace posible el llegar a producir derivados avícolas libres de antibióticos, seguros e inocuos para el consumo humano. En términos económicos, mejorar estos parámetros (inmunidad y digestibilidad) permite al productor disminuir costos de producción, ya que se obtendrán mejores resultados en ganancia de peso y conversión con menor consumo de alimento y menor inversión en tratamientos por enfermedades.
Producir con bienestar animal, con suplementos o aditivos naturales y seguros, considerando la seguridad alimentaria y la sostenibilidad ambiental, son actualmente las directrices de la industria avícola a nivel mundial, y esto es solo el comienzo.

Mandanos un mensaje

Send us a message